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viernes, 6 de enero de 2012

PARA ACAMPAR EN CASA

Claro que los niños quieren tener lo que ven en la televisión. A poca gente se le ocurre regalar macetas con plantas, mascotas, a menos que haya habido un consejo en la cumbre. ¿Y qué hay aparte de lo que muestra la televisión a cambio de miles de pesos? Parece que mucho, para niños recién nacidos, para niños de hasta cinco o seis años. Y las compras se van haciendo difíciles, sobre todo después del paso del panzón del Polo Norte. Lo bueno es que aún queda una librería en el puerto de Veracruz que da la batalla.


Allí encontramos este libro, cuya promoción oímos en el noticiero de Carmen Aristegui. Una idea de Kirén Miret, productora de radio y fotógrafa, que pasó de MVS a este libro de Ediciones SM. Y ella escribe que un grupo de colaboradores lo diseñaron "lo más completo que se nos ocurrió para que lo uses, leas, mires, oigas y hojees tanto como sea posible". (¿No es eso jugar?)
          Entonces nos zafamos de los juguetes que traen instrucciones para que los padres terminemos de armarlos, comprarles pilas y quizás operarlos porque el niño se durmió mientras se hacían los preparativos y se ajustaban las piezas para dicha de ingenieros que no pensaron mucho en la necesaria actividad que se espera de los juguetes (de donde, el mejor juguete, una pelota).
          Este año libros como el que aquí recomendamos, junto con el que está aquí abajo, demostraron que la lectura es un juego sólo comparable con bicicletas y columpios.

PALABRAS PARA RECONOCERNOS

El Colegio de México y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes terminaron en octubre la impresión de un libro genial:

No parece un juguete, lo es, y más. Tiene ilustraciones, poemas, mucho ingenio, es un librote de seiscientas veinte páginas que fue devorado hoy mismo por un niño de ocho años (se supone que estaba destinado a niños de diez años), quien esperaba un juguete de los que se caían de las estanterías de las tiendas desde noviembre, en todas el mismo surtido, objetos que van limitando las capacidades humanas y que nos llevaron por otros pasillos hasta que, cansados, nos metimos a una librería.
          Muy recomendable.

INFORMES, INSCRIPCIONES: jaimeva1@hotmail.com


Los libros en los hogares sirven para encauzar a los niños en el camino del estudio. Luego, los libros sirven para que los jóvenes se sientan seguros en el mundo que van descubriendo y son el apoyo de los universitarios en la solución de sus tareas académicas.
          El goce de la literatura se logra cuando los lectores saben ver los secretos que ésta guarda.
          La parte más importante de las obras literarias es la imaginación de los lectores, una máquina instalada por la escritura y operado por nuevos escritores.


           CURSO DE TRES MESES, LOS JUEVES A LAS 17:00 HRS.

SE UN ESCRITOR EN POS DE LA FAMA