Vistas de página en total

sábado, 8 de octubre de 2011

ICONOGRAFÍA DE LA SOLEDAD. MARÍA BERNS EN EL CEVART, POR LUCÍA DEBLOCK

INDIANOS, EXTRACTO DE ANTONIO FRANCISCO RODRÍGUEZ ALVARADO


LA TV, PROFESORA DE PASO

En un episodio de la serie The Defenders, el abogado, héroe invencible contra el fiscal, está asoleándose junto a una alberca. Bebe algo y tiene lentes oscuros, mismos que aprovecha para mirar a una mujer en bikini. Esa imagen es una propuesta que repite incansablemente la televisión y el cine de Estados Unidos. Trabajar sirve para poder descansar y mirar la belleza desde la otra orilla. Y las mujeres son adornos, objetos en la orilla.


No importa, el actor, James Belushi, de padres albaneses inmigrantes y nacido en Chicago, es simpático. Lo que pasa es que el tiempo de cada episodio no da para más. Y a los guionistas de la TV no les gusta salirse de lo "aceptado". Aunque el telespectador agradezca la imagen, también la gente de EU debe pensar que la vida es algo más que un trago y una mirada onanista.

LA TV, INVITADA ESPECIAL EN CASA

Concepción Olmedo manda un texto de Héctor de Mauleón publicado en El Universal, sin fecha, en la columna Cronista de guardia: "Sin Ariel no hay chaca chaca".
     Incluye datos relevantes, que hay que tener presentes:
     En 1955 había cien mil aparatos de televisión en México.
     En 2011, hay treinta aparatos por cada cien mexicanos (población actual: 112 millones de habitantes).
     La gente del instituto que mide el rating en medios electrónicos, IBOPE, asegura que cada mexicano pasa 4.45 horas diarias frente a la TV.
     Se transmiten 33 mil horas diarias de publicidad.
     En las casas privilegiadas de México hay pantallas de plasma, laptops, Blackberry, iPod y los mexicanos navegan en la red 2.52 horas al día.

LOS COLORES, POEMA DE RAMÓN DE JESÚS HERNÁNDEZ OLIVARES

He nacido rodeado de verdes follajes
y he visto blancas estrellas del firmamento,
he visto a mi madre postrarse ante tu imagen
entregando su sangre
y pidiendo extasiada
nacer bajo el estigma de tu imagen.

La inmensidad del aguamarina del firmamento
ha llevado en sus cometas oraciones
de un niño nacido de la tierra
buscando respuestas
en una piedra de granates facetados.

He visto la transparencia de las nubes aperladas
que llevan vida a las aves de colores, verdes, amarillas
y exóticas... de un jardín secreto
donde bailan las hadas... con sus alas doradas.

He visto las piedras de los ríos que esconden voces
de infantes, que traviesos juegan a tocar el sol
en su espejo.
Y los peces violeta, que transmiten los mensajes
sublimes del rostro enamorado y sonrojan su mejilla
lanzando besos plateados al salpicar sutilmente el rostro
de Cupido, que besa el espíritu del aire, que revoloteará
rizos dorados
combinando sus acaramelados hilos traviesos.

Al árbol de roble, que yace en el campo,
le he pedido un hechizo de amor.
Y al tocar mi pecho, brota cual perla carmesí
y el viento gris triste, revolotea las hojas verdes o amarillas
como profetizando en el tiempo
que me vestiré de otoño.

Y que brotarán de mis ojos perlas blancas y puras, por el amor
impenetrable de la perla que abrirá ese día
sus alas de cristal.


Poema publicado en Montparnasse Cafe, núm. 33, mayo de 2011. Traducido por Reny en la página 121, sección Parole della Mia Terra. Este número de la revista y otros: http://issuu.com/silviab. Directora de Redacción: Sarah Pan e Sissy.